La versión en español está después de la versión en inglés.
San Geraldo and I are heading together into Málaga today to see the special exhibition that was being installed at the Centre for Contemporary Art when I was there last Thursday. It opened the next day, on my birthday. He expressed an interest yesterday when I said I was going. He’s not big on walking all over the city like I do and he tends to complain about the heat. But the museum is 2 minutes from the train station and there are places for lunch all around. He’ll also get to see the Devan Shimoyama exhibit (click here). And I think he just wants to make me happy. Today’s photos are some of what I saw while I walked through town and the port Thursday.
I had my follow-up appointment with my doctor yesterday regarding my back. SG went with me. I’ll live. We’re beginning to get a better understanding about my nerve pain — which has nothing to do with age. In case you don’t know this about me, one of my major pet peeves is being told “that’s normal when you get old.” Especially since I am nowhere near old. Anyway, I’ve got an appointment next week with a specialist. I’ll fill you in. And then I’ll stop talking about my health (like an old person) and will continue talking about art, life, cats, my juvenile sense of humor, and San Geraldo.
San Geraldo y yo nos dirigimos juntos a Málaga hoy para ver la exposición especial que se estaba instalando en el Centro de Arte Contemporáneo cuando estuve allí el jueves pasado. Abrió al día siguiente, en mi cumpleaños. Expresó interés ayer cuando le dije que iría. No le gusta caminar por toda la ciudad como yo y tiende a quejarse del calor. Pero el museo está a 2 minutos de la estación de tren y hay lugares para almorzar por todas partes. También podrá ver la exhibición de Devan Shimoyama (haz clic aquí). Y creo que solo quiere hacerme feliz. Las fotos de hoy son algunas de las que vi mientras paseaba por el pueblo y el puerto el jueves.
Tuve mi cita de seguimiento con mi médico ayer con respecto a mi espalda. SG fue conmigo. Viviré. Estamos empezando a comprender mejor mi dolor nervioso, que no tiene nada que ver con la edad. En caso de que no sepas esto sobre mí, uno de mis principales manías es que me digan “eso es normal cuando envejeces”. Sobre todo porque no estoy ni cerca de ser viejo. De todos modos, tengo una cita la próxima semana con un especialista. Ya les cuento. Y luego dejo de hablar de mi salud (como un anciano) y sigo hablando de arte, vida, gatos, mi juvenil sentido del humor, y San Geraldo.
• Creo que son cruceros que esperan un autobús que los lleve en un viaje de un día.
• Como muchos otros, seguí el camino curvo para aprovechar la sombra.
• Iglesia de San Juan.
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