La versión en español está después de la versión en inglés.
Cousin Al and I lounged at the beach for a couple of hours Tuesday, had lunch at home on the terrace with San Geraldo, and then went to Plaza Mayor and McArthur Glen, so Al could buy some underwear. He didn’t find any. We both bought cheap sunglasses at C&A.
I wanted Al to see the ridiculousness that is Phillip Plein (click here). Al didn’t think it was ridiculous and ran inside. He asked, “If I slip on that dress, would you take my picture?” I was stunned and said, “If you slip on that €5,000 euro dress in the middle of this shop, I will pretend I don’t know you and walk out.” So, instead, he held it in front of himself for a photo. Then there was a bathing suit. He did slip that over his head and, although he looks totally wasted in that photo, he was not. At that point, it was obvious we were getting the side eye from the salespeople.
Al has recently joined the Sisters of Perpetual Indulgence and is trying to develop his persona. I think he’s currently a postulant. The Sisters devote themselves “to community service, ministry and outreach to those on the edges, and to promoting human rights, respect for diversity and spiritual enlightenment.” Thankfully, he didn’t buy the sweet pink, flame-shaped sunglasses that were only €208. He thought the sweet pink might be good for his persona but he didn’t know about the flames. Anyway, we’ve both read a bit about Phillip Plein and he sounds like a serious asshole.
I for one will never again set foot in that store. The photo above is of the cousins with Plaza Mayor’s giant metal bull’s private parts dangling over Al’s head.
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El primo Al y yo descansamos en la playa durante un par de horas el martes, almorzamos en la terraza de la casa con San Geraldo y luego fuimos a la Plaza Mayor para que Al pudiera comprar ropa interior. No encontró ninguno. Ambos compramos anteojos de sol baratos en C&A.
Pero quería que Al viera la ridiculez que es Phillip Plein (haga clic aquí). Al no pensó que fuera ridículo y corrió adentro. Él preguntó: “Si me pongo ese vestido, ¿me tomarías una foto?”. Me quedé atónito y dije: “Si te pones ese vestido de 5000 euros en medio de esta tienda, fingiré que no te conozco y me iré”. Entonces, en cambio, lo sostuvo frente a él para una foto. Luego había un traje de baño. Se lo pasó por la cabeza y, aunque parece totalmente perdido en esa foto, no lo estaba. En ese momento, era obvio que los vendedores nos estaban mirando de reojo.
Al se unió recientemente a las Hermanas de la Indulgencia Perpetua y está tratando de desarrollar su personalidad. Creo que actualmente es un postulante. Las Hermanas se dedican “al servicio comunitario, el ministerio y el alcance a los marginados, y a la promoción de los derechos humanos, el respeto por la diversidad y la iluminación espiritual”. Afortunadamente, no compró las gafas de sol de color rosa dulce con forma de llama que solo costaban 208 €. Pensó que el rosa dulce podría ser bueno para su personalidad, pero no sabía nada de las llamas. De todos modos, ambos hemos leído un poco sobre Phillip Plein y suena como un imbécil serio.
Por mi parte, nunca más volveré a poner un pie en esa tienda. La foto de arriba es de los primos con las partes privadas del toro de metal gigante colgando sobre la cabeza de Al.
• Al ya estaba dentro seleccionando zapatos, mientras yo seguía mirando el escaparate y la camiseta de 210€.
• Zapatillas por menos de 4.000€.
• Con Karl Lagerfeld, a quien estoy seguro se le volvió a pulir en el momento en que nos fuimos.
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