La versión en español está después de la versión en inglés.
San Geraldo and I are not the most compatible of sleepers. He likes it warm. I like it cool. He settles into one position and doesn’t move (while he’s asleep). I roll and sometimes kick, swing my arms, and even spin. I have been known to wake up with my head hanging off the side of the bed — although not in recent memory. We had the brilliant idea to get beds like we’ve seen often in Norway. Two individual beds placed next to each other, so we’re together, not sharing any covers, and reducing any motion disturbance.
The problem, however, is when we try to cuddle, the beds separate and someone could end up on the hard (wood) floor. Even if we ensure the beds can’t slide, that still leaves the unwanted crack. So I did my research and found a viscoelastic hybrid mattress guaranteed to be: the latest in thermoregulatory technology with thermal balance to avoid getting cold or hot, and perfect for sleeping as a couple (very little motion transfer). We shall see. I ordered the mattress hurriedly when it was reduced by 60 percent for “Black Friday,” which lasted through “Cyber Monday”. After Cyber Monday passed, the sale was extended for “Black Weeks.” That expires in less than 9 hours and I have no idea what’s next.
Yesterday was Fuengirola’s annual sport fishing contest. From 8 a.m. to 1:30 p.m., the beach was lined with more than 100 people fishing on their own designated patches of sand. I don’t know who won the €1,000 first prize or the €500 euro second prize, nor do I know what they caught.
Dudo and Moose continue to surprise us with new behaviors even after these 11-1/2 years. Dudo has always grudgingly shared his office chair with San Geraldo. Often he will push San Geraldo off the chair (he’s not that strong, just that annoying). Moose has never ever sat in the chair nor shown any interest. Until Saturday. I had gone in with SG’s morning cup of coffee to find Moose and not SG at the desk. SG was not in the room and had no idea. Sunday afternoon, SG announced he had nowhere to sit because Moose was again in the chair. Dudo, as you can see, was just as surprised as we were. Who’s in charge here?
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San Geraldo y yo no somos los más compatibles de los durmientes. Le gusta caliente. Me gusta Se acomoda en una posición y no se mueve (mientras duerme). Ruedo ya veces pateo, balanceo los brazos e incluso giro. Se sabe que me despierto con la cabeza colgando del costado de la cama, aunque no en la memoria reciente. Tuvimos la brillante idea de conseguir camas como las que hemos visto a menudo en Noruega. Dos camas individuales colocadas una al lado de la otra, para que estemos juntos, sin compartir cubiertas y reduciendo cualquier perturbación del movimiento.
El problema, sin embargo, es cuando tratamos de acurrucarnos, las camas se separan y alguien podría terminar en el suelo de madera. Incluso si nos aseguramos de que las camas no se puedan deslizar, eso aún deja la grieta no deseada. Así que investigué y encontré un colchón híbrido viscoelástico garantizado: lo último en tecnología termorreguladora con equilibrio térmico para evitar pasar frío o calor, y perfecto para dormir en pareja (muy poca transferencia de movimiento). Veremos. Pedí el colchón a toda prisa cuando se redujo en un 60 por ciento por el “Black Friday”, que duró hasta el “Cyber Monday”. Después de que pasó el Cyber Monday, la venta se extendió por “Black Weeks”. Eso caduca en menos de 9 horas y no tengo idea de qué sigue.
Ayer fue el concurso anual de pesca deportiva de Fuengirola. Desde las 8 a. m. hasta la 1:30 p. m., la playa estuvo llena de más de 100 personas pescando en sus propios parches de arena designados. No sé quién ganó el primer premio de 1.000 € o el segundo premio de 500 €, ni sé qué pescaron.
Dudo y Moose continúan sorprendiéndonos con nuevos comportamientos incluso después de estos 11 años y medio. Dudo siempre ha compartido a regañadientes su silla de oficina con San Geraldo. A menudo empujará a San Geraldo de la silla (no es tan fuerte, solo que molesto). Moose nunca se ha sentado en la silla ni ha mostrado ningún interés. Hasta el sabado. Entré con la taza de café de la mañana de SG para encontrar a Moose y no a SG en el escritorio. SG no estaba en la habitación y no tenía idea. El domingo por la tarde, SG anunció que no tenía dónde sentarse porque Moose estaba nuevamente en la silla. Dudo, como puedes ver a continuación, estaba tan sorprendido como nosotros. ¿Quién está a cargo aquí?
• “¿¡¿Que demonios?!?”
• Sábado por la tarde desde la terraza.
• Sábado por la tarde desde el pasillo trasero.
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