La versión en español está después de la versión en inglés.
MY FRIDAY TRIP TO TRÁFICO was worth the aggravation because I got to visit Lolo and Lara and enjoy their new café, El Duende, which means The Goblin. (Admittedly, the trip to Tráfico was also worth the aggravation because I have a drivers license.)
Several years ago, when Lolo started his first day at Mesón Salvador, it was immediately obvious that not only did he have plenty of experience, but he was a charmer. Everyone of every age immediately fell in love with him. Professional, competent, warm, kind, funny, easygoing, obviously sincere. Lara is no different. What a pair. They have a 3-year-old who already displays the family charm.
I left myself plenty of time before my appointment so I could relax and enjoy a cup or two of coffee. Of course, the coffee was perfect. The pastry, the Spanish version of my old childhood favorite black & white cookie was a bonus. Unlike the single-layer black & white cookie, these white & blacks are sandwich cakes filled with cabello de angel (angel hair), a preserve made from the yellow fibers inside a pumpkin. Believe it or not, as the name suggests, it’s heavenly.
After my experience at Tráfico, it was so late in the day that I decided to have lunch on my own before getting back on the train. Besides, I had taken a peek into the display case at El Duende and, although it hadn´t yet been filled, what was there looked really tempting. Lolo told me Lara was the chef and she was exceptional.
I had a plate of traditional Spanish meatballs in almond sauce and a dish with salchicha, Spanish summer sausage. I love traditional Spanish meatballs. These were as good as any could be, and it turns out Lolo himself had made them that day. The mixed dish with salchicha was out of this world. The servings were generous and filling, and there was fresh bread to soak up the delicious gravies — something I don’t usually do. Lolo thought I had washed my own dishes.
I also had an excellent glass of Rioja. And it was all less than €5! If you live in Málaga, visit El Duende. A three-minute walk from Victoria Kent Station. Always plenty of free parking. If you live somewhere else, Lolo and Lara are worth the trip. They already know most of their customers by name. From London, it’s about three hours — unless you drive — 21 hours isn’t so bad. There are no direct flights from The States, but what’s a few extra hours?
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MI VIAJE DEL VIERNES A TRÁFICO valió la pena porque pude visitar a Lolo y Lara y disfrutar de su nuevo café, El Duende. (Es cierto que el viaje a Tráfico también valió la pena porque tengo carnet de conducir.)
Hace varios años, cuando Lolo comenzó su primer día en el Mesón Salvador, fue inmediatamente obvio que no solo tenía mucha experiencia, sino que era un encanto. Todos, de todas las edades, se enamoraron inmediatamente de él. Profesional, competente, cálido, amable, divertido, tolerante, obviamente sincero. Lara no es diferente. Que par. Tienen un niño de 3 años que ya muestra el encanto familiar.
Dejé bastante tiempo antes de mi cita para poder relajarme y disfrutar de una taza de café o dos. Por supuesto, el café estuvo perfecto. La pastelería, la versión en español de mi galleta negro y blanco favorita de la infancia fue una ventaja. A diferencia de la galleta negro y blanco de una sola capa, estas galletas blancas y negras son pasteles tipo sándwich rellenos de cabello de ángel, una reserva hecha de fibras amarillas dentro de una calabaza. Lo crea o no, como sugiere su nombre, es celestial.
Después de mi experiencia en Tráfico, era tan tarde que decidí almorzar solo antes de volver al tren. Además, había echado un vistazo a la vitrina de El Duende y, aunque todavía no estaba llena, lo que había allí parecía realmente tentador. Lolo me dijo que Lara era la chef y que era excepcional.
Tomé un plato de albóndigas en salsa de almendras y un plato con salchicha. Me encantan las albóndigas con salsa de almendras. Eran tan buenos como cualquiera podría ser, y resulta que Lolo los había hecho ese día. El plato mixto con salchicha estaba fuera de este mundo. Las raciones eran generosas y abundantes, y había pan fresco para absorber las deliciosas salsas — algo que no suelo hacer. Lolo pensó que yo había lavado mis propios platos.
También tuve una excelente copa de Rioja. ¡Y todo era menos de 5 €! Si vives en Málaga, visita El Duende. A tres minutos a pie de la estación Victoria Kent. Siempre hay mucho aparcamiento gratuito. Si vives en otro lugar, Lolo y Lara merecen el viaje. Ya conocen a la mayoría de sus clientes por su nombre. Desde Londres, son aproximadamente tres horas, a menos que conduzca; 21 horas no es tan malo. No hay vuelos directos desde Estados Unidos, pero ¿qué son unas horas extra?
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