La versión en español está después de la versión en inglés.
I MISS PRE-PANDEMIC LIFE. I’m sure I don’t miss it as much as others who haven’t had it so easy. All I can complain about is that I’m bored. (OK, maybe I feel a bit hopeless.) Yes, I have plenty to do, but I’m hardly motivated to do anything. I simply want to run away. And run away is what my mind regularly does.
I was looking at a photo of the Kid Brother and me sitting on a cannon at Fort Ticonderoga (click here), about 270 miles/435 km north of where we lived on Long Island, and that got me thinking of the old cannons in Fuengirola. That in turn took me to YouTube to find unusual versions of Paganini’s Pachelbel’s Canon.
According to Wikipedia, a canon, as opposed to a cannon, is “a contrapuntal compositional technique that employs a melody with one or more imitations of the melody played after a given duration. The initial melody is called the leader, while the imitative melody, which is played in a different voice, is called the follower.” I found plenty of unconventional versions of Pachelbel’s Canon but I’ve shared just one of the ones I liked that didn’t make my brain rattle, and didn’t go on for more than 9 minutes, (which means don’t send me the ones you find; I’ve listened to dozens).
Thursday was a great day from start to finish. Friday, coming after a great day from start to finish, was a letdown — except for seeing Tynan, Elena, and their daughter Paula (home from university for Easter) in the morning. Saturday was a blah day until my video chat with my sister-from-another-mother Susan in Oregon and then dinner with Lulu. Sunday was another blah day until our video chat with Nick, Alyson, Penny, and Edward in Colchester, England.
I woke up miserable this morning and forced myself out of the house after breakfast. Afterall, I had to get pictures of the cannons. San Geraldo baked apple cake yesterday and we’re having Moorish Chicken and Nut Pie for dinner. I’m doing a bit better currently. Talking (whining) to you helps.
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ECHO DE MENO LA VIDA pre-pandémica. Estoy seguro de que no lo extraño tanto como a otros que no lo han tenido tan fácil. De lo único que puedo quejarme es de que estoy aburrido. (Bueno, tal vez me siento un poco desesperado.) Sí, tengo mucho que hacer, pero apenas estoy motivado para hacer nada. Simplemente quiero huir. Y huir es lo que mi mente hace habitualmente.
Estaba mirando una foto de El Hermanito y yo sentados en un cañón en Fort Ticonderoga, a unas 435 km/270 millas al norte de donde vivíamos en Long Island, (haz clic aquí) y eso me hizo pensar en los viejos cañones de Fuengirola. Eso, a su vez, me llevó a YouTube para encontrar versiones inusuales del Canon de Pachelbel de Paganini.
Según Wikipedia, un canon, a diferencia de un cañón, es “una técnica de composición contrapuntística que emplea una melodía con una o más imitaciones de la melodía tocada después de una duración determinada. La melodía inicial se llama líder, mientras que la melodía imitativa, que se toca con una voz diferente, se llama seguidor”. Encontré muchas versiones no convencionales de Canon de Pachelbel, pero he compartido solo una de las que me gustó que no hizo que mi cerebro se agitara y no duró más de 9 minutos (lo que significa que no me envíes las que encuentras; he escuchado decenas).
El jueves fue un gran día de principio a fin. El viernes, después de un gran día de principio a fin, fue una decepción, excepto por ver a Tynan, Elena y su hija Paula (en casa de la universidad para Semana Santa) por la mañana. El sábado fue un día aburrido hasta que charlé por video con mi hermana-de-otra-madre Susan en Oregon y luego cené con Lulu. El domingo fue otro día aburrido hasta nuestro video chat con Nick, Alyson, Penny y Edward en Colchester, Inglaterra.
Me desperté miserable esta mañana y me obligué a salir de la casa después del desayuno. Después de todo, tenía que sacar fotos de los cañones. San Geraldo horneó tarta de manzana ayer y vamos a cenar pastel de pollo y nueces a la morisca. Lo estoy haciendo un poco mejor actualmente. Hablarte (lloriquear) te ayuda.
• En el castillo Sohail (de diciembre; no caminé allí hoy).
• Esta mañana mientras visitaba los cañones. El boxeo está de moda en la playa este año (mejor que estar adentro).
• Entré en la bolsa de regalo de chocolate de Lulu y elegí a SuSu primero en honor a Susan. Fue tan dulce como ella.
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